martes, 18 de febrero de 2014

Karrantza... un pueblo abarrotado de encantos.

No sé si será porque yo  nací, me crié y vivo en un pueblo; o, tal vez, porque con el paso de los años me siento más cerca de la transparencia de l@s niñ@s que de la hipocresía de l@s adult@s, pero a mí sí que me gustaría  que  estos niños de Karrantza   pudieran jugar, durante el recreo en el colegio, en un espacio acondicionado con sus tractores y demás maquinaria agrícola traídos de casa.
Si en la escuela de un pueblo como el Valle de Carranza la única salida que encontramos para estos niños que quieren disfrutar en sus recreos jugando con sus tractores es reñirles porque manchan... creo que somos poco imaginativos y nos portamos como lo que seguramente somos: adult@s engreíd@s.
En mi opinión, en nuestro centro escolar debiéramos estar orgullosos de que los niñ@s carranzanos traigan sus tractores para jugar en el recreo con ellos. Y no sólo eso, deberíamos poner a su disposición una zona para que jueguen, disfruten y desarrollen su imaginación e intercambien sus experiencias.
En muy pocos patios de colegio se puede ver a l@s niñ@s jugando con sus camiones, tractores, excavadoras, remolques, enfardadoras, trilladoras...   A mí me parece algo singular, propio del paisaje del valle encantado y creo que habría que impulsarlo decididamente en vez de  buscarle inconvenientes que pueden ser minimizados si se quiere.

Vuelvo a recurrir a ese ese extraordinario libro que es "El Principito":

"TODAS LAS PERSONAS GRANDES HAN SINO NIÑOS ANTES. (PERO POCAS LO RECUERDAN.)"
               

"Siembra un pensamiento y recogerás una acción,
siembra una acción y recogerás un hábito, 
siembra un hábito y recogerás un carácter,
siembra un carácter y recogerás un destino".
                                                                                                                          Dicho popular
Creo que es por  cosas tan naturales como ésta por las que me atrae acercarme a hablar con l@s niñ@s y a sacarles fotografías jugando con sus tractores, mientras que no me motiva nada hablar con quien parece no ser  feliz cuando vemos a los niños felices.
 ¿En qué colegio de Bizkaia se pueden ver estas  imágenes? A mí me satisface verlas en el "mío".
"Nunca entenderé porqué hay gente que se enorgullece 
de  aquello por lo que debería sentir vergüenza
 y se avergüenza de aquello por lo que podría sentirse orgullosa".

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